Ingredientes (para obtener el triple)
- Una botella de vino tinto,
- 3 recipientes contenedores,
- agua,
- licor blanco (vodka, ginebra...)
- y lo más importante: invitados ya borrachos.
- Primero, dividimos el vino tinto equitativamente entre los 3 recipientes contenedores;
- A continuación, procederemos a rellenar los recipientes hasta el nivel deseado con agua;
- En el siguiente paso, añadiremos unas gotitas de licor para darle mayor "cuerpo" al vino;
- Mezclar, no agitar, y servir.
Hemos conseguido un vino rosado, de paso de boca fácil pero con cuerpo que hará las delicias de nuestros invitados, que nos dedicarán frases del estilo "Cabrón, te dejabas el mejor vino para el final pa' que no te lo bebieramos" o incluso "Joder, qué vino más bueno!! Dónde lo has comprado?" a lo que se recomienda responder con evasivas y secretismo. Recordad: es muy importante alabar el vino al probarlo para que la gente lo reciba mejor.
Alternativas
Querido amigo, ya sé lo que te preguntas: "sí, muy bien, pero yo quiero tinto!". Deseo concedido! Añade sirope y/o licor de frutas rojas a la mezcla y recuerda alabar los tonos frutales y aromáticos de este vino joven.
"Y si quiero blanco?" 2 opciones: o bien sustituir el vino tinto por blanco y seguir el procedimiento normal; o bien utilizar vino de esta uva (si lo hay!): tempranillo blanco. En el primer caso se alabará la frescura y ligereza, en el segundo el cuerpo y la solidez.
Eso es todo por hoy amigos. Pronto volveremos con nuevos brico-milagros, para esas situaciones en las que hacen falta.
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